Upstone

Información básica

Para inversores

Tipos de inversión en Upstone

Upstone ofrece dos tipos principales de inversiones:

• Inversiones de deuda: Consisten en conceder préstamos a promotores inmobiliarios para proyectos a corto o medio plazo. Los inversores obtienen pagos regulares de intereses, con plazos que oscilan entre 6 meses y varios años.
• Inversiones de capital: Los inversores pueden comprar acciones de proyectos inmobiliarios, normalmente propiedades que generan ingresos. Los rendimientos se obtienen en forma de dividendos o plusvalías, aunque dependen del rendimiento de la propiedad.

¿Cómo funciona Upstone?

Upstone permite a los inversores participar en inversiones inmobiliarias tanto de capital como de deuda. Mediante las inversiones de capital, los inversores pueden adquirir participaciones en propiedades generadoras de ingresos y obtener dividendos en función del rendimiento de la propiedad. Las inversiones de deuda, por su parte, implican la concesión de préstamos a promotores inmobiliarios por plazos fijos, con pago periódico de intereses.
Los propietarios de proyectos pueden publicar sus proyectos de desarrollo en la plataforma, proporcionando detalles financieros completos y previsiones de proyectos. Los inversores pueden elegir los proyectos en función de su apetito de riesgo, duración y rentabilidad prevista, todo ello a través de una plataforma en línea de fácil uso. Sin embargo, los inversores deben tener en cuenta que Upstone no ofrece un mercado secundario, lo que significa que las inversiones suelen mantenerse hasta la finalización del proyecto.

Riesgos de invertir en Upstone

Invertir en Upstone conlleva los riesgos habituales del crowdfunding inmobiliario. En el caso de las inversiones basadas en deuda, el principal riesgo es el impago por parte del promotor, aunque Upstone no ha registrado impagos hasta la fecha. Sin embargo, los inversores deben tener cuidado con los posibles retrasos o reestructuraciones de los proyectos, que podrían afectar al calendario de los beneficios. En cuanto a las inversiones en renta variable, los riesgos incluyen las fluctuaciones del valor de los inmuebles, unos ingresos por alquiler inferiores a los previstos y la volatilidad del mercado, que pueden afectar al rendimiento global de las inversiones. Al no existir un mercado secundario, la liquidez también es un problema para los inversores que buscan una salida rápida.